No me morí como Filípides, pero ayer pude entender porqué aquel soldado/mensajero griego murió hace 2.500 años, cuando fue corriendo desde Maratón hasta Atenas para anunciar su victoria sobre los Persas.
El recorrido de esta carrera es durísimo, hablando en términos de Maratón Urbana. Saliendo de la llanura dónde está situado el estadio de la ciudad de Maratón, el trazado hasta el centro de la capital es lineal, con constantes subidas teóricamente suaves, pero que llegan a acumular un desnivel considerable en su totalidad.
Todos los corredores saben que venir aquí sólo es por el simbolismo que supone, pues ni el recorrido es demasiado bonito, ni permite hacer un tiempo personal demasiado bueno.
Yo completé los 42,195 Km. en 3 horas, 15 minutos y 8 segundos. Y os aseguro que corrí como un loco. Sin querer hacer el fantasma, diré que estoy seguro de que tal como fui, hubiese podido estar entre 3h05 y 3h10 en una Maratón más plana. El año pasado hice mi primer maratón de asfalto en Madrid con un tiempo de 3h12, y corrí con mucha menos potencia y constancia que aquí. Estoy muy satisfecho del tiempo realizado en Atenas, y tengo claro que el próximo Maratón, querré demostrar que esto que he dicho es posible, para ir a bajar de las 3h10…. Y hacerlo a mi estilo: Sin entrenar para el Maratón, y sólo aprovechando el volumen de entreno que me aportan otras carreras próximas, como era, en este caso, la Jungle Marathon.
Mi amigo Jordi Vila también terminó, aunque se le atragantaron algo más las pendientes de esta tierra, cruzando la meta en 3h49’36". Él se tomaba esta carrera como una parte del entreno de ultra fondo que tiene que hacer para su primera participación en la "Marathon des Sables", en la que compartiremos equipo el próximo mes de Abril.
De todos modos, a pesar de que el recorrido era duro y bastante feo, también debe decirse que entrar en el "Panathinaikon Stadium" del centro de Atenas, justo al lado de la Acrópolis, después de completar el Maratón en su recorrido original, es una experiencia que todo Runner tiene que vivir al menos una vez. Y poderlo hacer justo el año en que se conmemora el 2.500 aniversario de la leyenda, será un recuerdo para toda la vida.
A veure si podem fer una altra plegats!
Enveja sana!