Terminada la tercera etapa y estoy muy contento, voy onceavo en la general. ¡Ha ido genial! Hemos empezado con una subida muy dura y técnica que ha hecho que el grupo se dispersara mucho, seguidamente un descenso técnico entre los árboles para llegar a una zona entre valles estrechos que desembocaba a una comunidad con tres monasterios, en medio de la nada, otro mundo, una joya.
Después hemos corrido por espacios planos hasta el CP2 donde han comenzado 9 Km. de dunas. Desde el inicio de la etapa hemos estado corriendo con Amanda de Kock, la primera clasificada femenina, ayer ya coincidimos un rato, pero no la pude seguir. Hoy hemos hecho toda la etapa juntos, hemos pasado las dunas a buen ritmo, y hemos cruzado la meta juntos en 7º lugar, pero está claro que «Ladies first» y ella ha quedado en séptimo lugar y yo octavo. ¡Ha sido un placer tenerla de compañera!
Estoy emocionado con los paisajes y también con la fauna que vamos encontrando: hoy hemos visto camellos (de dos jorobas), hemos corrido entre rebaños de ovejas y vacas, y esta noche me he dormido escuchando los aullidos de los lobos. Nunca los había oído, estoy conmocionado.
La mala noticia del día ha sido que un participante me ha partido un palo, y no sabéis lo que duele esto ahora mismo. Utilizo mucho los palos, me salvan mucho el impacto en las rodillas. Me he espabilado, y lo he solucionado haciéndome un bastón de madera.
Me siento muy bien para la gran etapa de mañana (76Km.), pero con mucho respeto, porque cada día abandona gente, sobre todo de los que más corren, debo gestionar bien mis fuerzas y mi cuerpo para no romperme. Mañana no se a qué hora llegaré y si podré pasar crónica, pero pronto tendréis noticias mías. ¡Enviadme energía!
Des-de EFIENERGY t’enviem el que millor sabem fer ENERGIA per continuar endavant i completar la cursa en el top 20. Una abraçada.